sábado, 14 de noviembre de 2009

Ni pan-dulce ni esperanza para navidad...

Corria el 2001, en un conservatorio, un grupo de pibes (no tanto), daban sus pasos finales, y egresaban, y decidian en el peor momento de la historia de nuestro pais, formar una banda llamada “Las pastillas del abuelo”(se pensaban llamar "buenos para nada" o "las zapatillas de Hernan", lo que si las pastillas como finalmente surgio de nombre (quien sabe si el nombre hace o no referencia a los hechos) les fue como le fue al pais en los siguientes años, luego de la renuncia de Fernando de la Rua, cuando el dólar alcanzo los cuatro pesos, donde el corralito nos acorralaba ferozmente, y la gente que se habia quedado, apostando en el pais (como ellos), no sabia pa donde tirar, fue un año durísimo el 2002 para todos, incluso otras bandas ya consagradas y con gran convocatoria como los piojos y la renga casi cortan por unos meses, pero despues se terminan dando cuanta que lo que le quedaba a la gente era la selección de Bielsa y el rock....
Es asi como las pastillas empiezan a recorrer algunos puntos de la capital, piti se dedica a grabar temas caseros con su guitarra (ya himnos pastilleros todos por cierto...), y el resto de la banda la aguanta dando clases particulares (cosa que hoy sigue en pie).

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